Por desconocer las mejores prácticas en mercadotecnia por Internet, las empresas continúan adquiriendo páginas web que no resultan de utilidad para fines de promoción.
Por tratarse de un canal de comercialización relativamente nuevo, las empresas continúan cometiendo graves errores al adquirir su página web, lo cual les ha impedido utilizar el Internet de una forma efectiva para promocionar sus productos y servicios, posicionar sus marcas e incrementar las ventas.