Ante la inminente entrada del Internet, el correo electrónico, los sitios web y el Comercio Electrónico, las empresas están llevando a la práctica diferentes estrategias para dar frente a este proceso de integración del Internet con los negocios.
Internet está cambiando la forma de hacer negocios y lo está haciendo a una velocidad exorbitante. Nadie había imaginado realmente que llegara a tener el impacto que ha tenido hasta ahora. Pocos habían previsto su llegada. Su empresa tendrá forzosamente que establecer una estrategia a corto plazo para integrar las tecnologías de Internet con su negocio. Esto es un hecho.
Ante la inminente entrada del Internet, el correo electrónico, los Sitios Web y el Comercio Electrónico, las empresas están llevando a la práctica diferentes estrategias para dar frente a este proceso de integración del Internet con los negocios.
¿En qué situación se encuentra su empresa?
- ¿Es usted de los que ha decidido retrasar su estrategia de integración al mundo de Internet y esperar a ejercer el presupuesto del próximo año por el simple hecho de no haber presupuestado la inversión en tecnología para este ciclo?
- ¿Qué puede tener una mayor prioridad que satisfacer las actuales necesidades de información de sus clientes a través de un Sitio Web?
- ¿Puede su empresa correr el riesgo de perder penetración en su mercado porque su competencia cuenta ahora con un Sitio en el que ofrece un mejor servicio a sus clientes?
- ¿Sabe usted que existen importantes beneficios económicos al implementar con éxito un Sitio Web rico en contenido?
- ¿Ha Usted aprendido la lección de las empresas que han fracasado por haber implementado Sitios Web con la etiqueta de "sólo presencia"?
En el corto plazo iniciará en nuestro país una segunda etapa en el proceso de integración de las tecnologías de Internet con los negocios: El comercio electrónico. Las inversiones en tecnología serán naturalmente mucho mayores a las que se han destinado hasta este momento para el desarrollo de Sitios Web. Los retornos de inversión justificarán desde luego los montos de tales inversiones.
La pregunta ahora no es si su organización debe estar en Internet o no, ya que los Sitios Web se han convertido en una necesidad básica para las empresas. La pregunta es mas bien cuándo y cómo participar en Internet.
¿Puede su organización esperar más tiempo para iniciar este proceso de integración?
Es una cuestión de prioridades. Usted decide.
